En un post anterior publiqué algunas pautas para comenzar a hacer tu huerto casero ecológico en este artículo desglosé los pasos a seguir y como lo prometido es deuda, en esta ocasión te explico el primer paso a seguir para hacer realidad tu huerto.
El primer paso es hacer semilleros antes de sembrar en los envases o espacios que tienes designado para ello. Los semilleros no son otra cosa que plántulas fuertes y listas para ser trasplantadas al suelo de forma directa . Te preguntarás: ¿por qué no sembrar las semillas directamente en el terreno o en el envase?
Por varias razones:
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Produces plántulas más fuertes y resistentes al sol, lluvia, enfermedades, etc. Por ejemplo una planta de lechuga que germina en el suelo directo posee más probabilidades de que el sol la queme ya que al ser una planta delicada necesita menos luz solar directa. De igual forma sucede si recibe un aguacero intenso, pues podría llegar a romperse o a pudrirse por el exceso de humedad. Los semilleros nos dan la ventaja de controlar la cantidad de agua y luz solar que reciben.
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Haces mejor uso del espacio en tu huerto. Una vez tienes las plántulas desarrolladas, podrás tener una mejor noción del espacio que van a ocupar al trasplantarlas.
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Usas las semillas de forma más eficiente. Al hacer semilleros podrás contabilizar el uso de las semillas evitando su desperdicio.
¿Qué necesitas para hacer un semillero?
Materiales:
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Bandejas para hacer semilleros en distintos tamaños o envases/tiestos pequeños individuales. Otra opción son bandejas de material biodegradable pero tienden a ser más costosas. También puedes reciclar cualquier envase con huecos que tengas, como por ejemplo el de los huevos.
- Composta o fertilizante orgánico. No recomiendo fertilizantes químicos.
- Tierra estéril como el “peat moss” o el “coco moss”
- Semillas ecológicas
- Guantes
- Paletas de madera pequeñas (palitos de helado) o cualquier otro artículo que consideres bueno para rotular.
- Marcador
- Agua libre de cloro
Opcional:
- Arena de río
- Otros fertilizantes/nutrientes en polvo como el kelp, alfalfa, cal, etc.
Procedimiento para hacer los semilleros:
Primer paso:
- Mezclar la misma cantidad de tierra estéril y de composta 1:1. Ejemplo: 1 galón de tierra con 1 galón de composta. Puedes añadirle un poco de arena de río, cal, kelp, etc. (1 a 2 puñados) esto es opcional y no es necesario si no lo tienes disponible. Ver la imagen a continuación:
Segundo paso:
- Llenar tus envases o bandejas de siembra con la mezcla de tierra y composta.
Tercer paso:
- Hacer huecos en la tierra de aproximadamente de ½ pulgada de profundidad. Colocar las semillas de acuerdo a las instrucciones de la etiqueta. En algunos casos puedes colocar varias en un solo hueco, en otros casos debe ser solamente una.
Cuarto paso:
- Hidratar las bandejas y/o envases con agua no clorada. Intenta hacerlo con una regadera tipo “shower” para asegurarte de que no se dañe el semillero por la presión del agua.
Quinto paso:
- Colocar los semilleros en un lugar donde reciban al menos 6 horas de luz solar, mejor si es de manera indirecta y no tan fuerte como el sol de mediodía (para climas tropicales). El lugar debe estar protegido de lluvia en exceso. Ejemplos de lugares pueden ser balcones, aleros, una ventana, etc. Los semilleros deben mantenerse hidratados, si ves que la tierra está seca debes regarlos. Ten en cuenta que estos semilleros puedan ser vulnerables para las aves. Te recomiendo que utilices una red de alambre para cubrirlas de las visitas inesperadas.
Verás tus primeras plántulas germinar en 2 a 3 días, no obstante, para que se desarrollen y alcancen una altura adecuada debes esperar de 3 a 5 semanas. Tan pronto alcancen 2 a 4 pulgadas estarán listas para trasplantar a un envase/tiesto más grande (explicaremos cómo hacerlo próximamente en el blog).
Una vez tengas tus semilleros listos los próximos pasos a seguir serán:
- Cómo trasplantar desde el semillero al huerto
- Cuidar de tus Siembras*
- Cosechar*
*Pendiente a los próximos posts en el Blog, pues estaremos explicando en detalle cada uno de estos pasos.
Recuerda disfrutar el proceso de sembrar, es algo muy mágico y muy satisfactorio. 🙂